Hoy en día todos nos hemos volcado en los medios sociales para desarrollar nuestras estrategias de comunicación. La capacidad que estos tienen de difundir nuestro mensaje es enorme, nos permiten ser muy creativos y diseñar los mensajes directamente desde la organización.
Pero a la hora de planificar nuestras acciones de comunicación no podemos olvidarnos de los medios tradicionales, los escritos, la radio y la televisión. La relación que se crea entre la marca y el receptor es completamente diferente en los medios on line y en los medios off line. Mientras que en el mundo digital tenemos acontecimientos que pasan rápidamente, hay que estar “siguiendo” a las marcas a cada momento, los receptores son muy dinámicos, proactivos, además de prescriptotes de nuestros productos o servicios, en los medios tradicionales creamos un vínculo directo y personal entre la marca y el consumidor, sin interferencias, quizás más nítido, menos confuso. Es verdad que sólo “controlamos” parte del mensaje porque no somos nosotros los que lo contamos si no otra persona ajena a la empresa.
Por lo tanto, a la hora de proyectar una campaña debemos tener en cuenta ambos espacios, diseñar acciones complementarias, que vayan de la mano, para aprovechar todas las posibilidades que ambos medios nos presentan. Aunque el mundo de internet tiene un potencial enorme, los medios tradicionales siguen estando en la vida de casi todos nosotros.
Posdata: Gabinete de comunicación on line pero también off line.
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