Lo que nos gusta de organizar eventos es que cada uno es diferente. Es diferente el cliente, el motivo, el espacio, el presupuesto, la época del año, el número de invitados… pero, desde nuestro punto de vista, siempre deben tener algo en común: deben transmitir la mejor imagen de la empresa como anfitriona y organizadora.
Hace unos días organizamos nuestro último evento antes de las vacaciones, y estamos muy contentos. Inauguramos las oficinas de una consultora en Bilbao.
El cliente quería una acción sencilla pero bien organizada. Recolocamos el mobiliario y dejamos un espacio diáfano para que los invitados y el servicio de camareros se moviese sin dificultad. En la entrada, personal de la empresa recibía a los invitados. Nos animamos a colocar un Photocall para que todos se hiciesen una foto, así que después hemos realizado un reportaje fotográfico de mejores momentos del evento.
Ya dentro, el sonido en vivo de una guitarra como música de ambiente. Tras unas breves palabras de los socios, se abrió la zona del cortador de jamón que, como siempre en los cócteles, tuvo gran éxito e hizo que el ambiente se fuese animando. Al mismo tiempo, a la guitarra se unieron saxo y contrabajo, amenizando el resto de la velada en un tono suave de música de jazz.
A la salida los caballeros y las señoras recibieron sus respectivos recuerdos de este acontecimiento que suponía una presentación en sociedad de esta organización y todos sus trabajadores. Creemos que superaron la prueba con éxito y muy buena nota.
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